Diana disfruta de una vida perfecta con su marido y su hija. Pero al acercarse el decimoquinto aniversario de un suceso que tuvo lugar cuando ella estudiaba en el instituto, donde un estudiante armado la arrinconó a ella y a su amiga Maureen, Diana comienza a tener confusas visiones de un presente no tan perfecto como pensaba. Acosada por unas imágenes que amenazan con resquebrajar los muros de su realidad, Diana tendrá que bucear en su pasado para averiguar qué ocurrió realmente aquel día.
Comentario
Con cierto retraso –es una película de 2007- nos llega el segundo trabajo del director de origen ucraniano Vadim Perelman, cuya ópera prima, el melodrama Casa de Arena y Niebla, consiguió bastante repercusión en su momento. El director, que ahora prepara el remake de Poltergeist decidió adaptar la novela de Laura Kasischke que, según la autora, “trata sobre los sueños y la imaginación, esa explosión de éxtasis imaginativo o agonía, y la desintegración de un sueño". Elementos oníricos para una historia en la que se aborda la pérdida de la juventud y se imagina cómo será ser adulta y superar todos los problemas. Perelman vuelve a utilizar un discurso narrativo muy dramático y para ello recurre a dos actrices que son el mismo personaje: Uma Thurman y Evan Rachel Wood. La película fue realizada de manera independiente, concretamente por 2929 Productions, con lo cual su impacto mediático fue mucho menor que el anterior trabajado realizado por Perelman, producido por Dreamworks.
Curiosidades
El director siempre le enseñaba a Uma y Evan lo que había rodado la otra, ya que quería que entendieran que estaban interpretando a la misma persona y que se observaran para captar la forma de gesticular y de hablar de la otra.