¿Imposible algo nuevo?
Por
David Sanz
“Nuevas”
aventuras del agente Ethan Hunt. Límite de dos días para recorrer
medio Mundo y recuperar el objeto de deseo del malvado de turno. Lo
último en tecnología de telecomunicaciones siempre infalible (salvo
un guiño de falta de cobertura que funciona como nota de humor). El
mejor y más fiel equipo de colaboradores. Las perfectas caretas que
permiten suplantar a cualquier persona. Arrojarse colgado de un cable
y quedar a pocos centímetros del suelo. La chica. Explosiones, helicópteros,
lanchas a motor, paracaídas. El sorprendente descubrimiento en los
minutos finales de la película de quién es el verdadero villano. Situaciones
cada vez más complicadas en las que no parece posible salir con vida.
Y, por supuesto, la famosa música que se ha convertido en la mayor
seña de identidad.
Si
alguien espera encontrar algo nuevo en esta tercera entrega de la serie
Misión Imposible, de nuevo protagonizada y producida por Tom
Cruise, se llevará una gran decepción. Aunque no creo que nadie sea
tan ingenuo.
Es
muy difícil crear tensión dramática cuando todos los espectadores
sabemos que, por muy imposible que parezca la situación en la que se
ve envuelto nuestro protagonista, saldrá vencedor sea de un modo u
otro. Y no es que los guionistas no se devanen los sesos buscando nuevas
y sorprendentes situaciones en las que todo está perdido y no hay escapatoria
posible. El caso es que siempre hay escapatoria.
Como
es habitual en estas producciones, el reparto se nutre de secundarios
de lujo, Philip Seymour Hoffman y Laurence Fishburne, correctísimos
en sus respectivos papeles, y bellas imágenes de los lugares donde
transcurre la acción: en esta tercera entrega visitamos las catacumbas
y catedrales de El Vaticano y los rascacielos y arrabales de Shanghai.
La
pregunta que me viene a la cabeza es la siguiente: ¿cómo consigue
Hollywood que sigamos yendo a ver sus productos si son calcos perfectos
unos de otros? Plazo límite para contestar a la cuestión: el estreno
de Misión Imposible 4. Aunque al final de la recién estrenada
tercera parte parece que Ethan Hunt cambia la excitante vida de agente
secreto por la tranquila vida familiar, estoy seguro de que volverán
a convencerle para una nueva misión imposible. ¿Me convencerán a
mí para que entre de nuevo en la sala de cine?
Comparte este texto: