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Sinopsis
Arthur Bishop es un asesino a sueldo con un estricto código de honor y extraordinarios talentos. Pero Bishop ha llegado a un punto en su carrera en el que siente que está listo para retirarse. Por desgracia, debe realizar un último trabajo, eliminar a su mejor amigo, Harry.
Comentario
Hollywood sigue sacando nuevos remakes. Esta semana llega una versión de Fríamente... sin motivos personales, la película de Michael Winner de 1972 protagonizada por Charles Bronson y Jan-Michael Vincent. “Uno de los aspectos más interesantes de la película era que tomaba un género ya establecido, el cine de acción o el 'thriller', para crear un nuevo tipo de personaje, el sicario, y dotar de elementos mitológicos y freudianos a la relación entre los dos protagonistas, Bishop y Steve, el mentor y el protegido, la figura paterna y el hijo", indica el productor William Chartoff, a quien se le ocurrió la idea del remake hace 15 años. La idea era mantener lo máximo del original y simplemente actualizar los personajes y la acción. Se eligió a Simon West, director de Con Air o Tomb Raider. “Ha habido muchas películas de sicarios a lo largo de los años, ésta era diferente, porque el modus operandi de Bishop como asesino es que la muerte tiene que parecer un accidente”, afirma West. La gran estrella de esta película de acción es, sin embargo, Jason Statham que encarna el papel que tenía Charles Bronson. Ben Foster (30 días en la oscuridad) y Donald Sutherland (Orgullo y Prejuicio) le acompañan en el reparto principal.
Curiosidades
Al actor Ben Foster le da vértigo simplemente mirar desde el suelo un rascacielos hacia arriba. Y tuvo que lidiar con una secuencia de la película en la que el personaje de Statham y el suyo caen en caída libre, sujetos a una especie de cuerda de 'puenting', pero sin esa elasticidad. Era un descenso de 30 pisos, algo más de 100 metros. “Fue una experiencia realmente angustiosa”, recuerda el actor.
Enlaces
Bases de datos: IMDb
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