En el futuro, juego y entretenimiento han evolucionado hacia un híbrido terrorífico: humanos controlan a otros humanos en juegos multi-player online a gran escala. La tecnología para el control de la mente se ha extendido completamente, y en el centro de la controversia está su creador, el multimillonario Ken Castle. Su última invención, el shooter en primera persona “Slayers”, permite a millones de personas hacer realidad sus más salvajes fantasías online frente a una audiencia global. Kable es la superestrella y héroe de culto del ultraviolento “Slayers”. Kable está controlado por Simon, un joven jugador con el estatus de una estrella del rock, que desafía todos los límites guiándole a la victoria cada semana. Alejado de su familia, encerrado y obligado a luchar contra su voluntad, este gladiador moderno debe sobrevivir el suficiente tiempo para escapar del juego y liberar a su familia.
Comentario
Una de las vertientes de las historias de ciencia ficción tiene que ver los mundos virtuales. Gamer es un thriller de acción que lleva la realidad virtual a una nueva dimensión, una en la que los seres humanos son capaces de controlar a otros, igual que cualquier puede controlar a un personaje en un videojuego. Mark Neveldine y Brian Taylor, la pareja creadora tras Crank, querían seguir haciendo un film frenético pero dándole una temática más profunda y trascendente. "Aunque la historia es extravagante, se cimenta en la realidad –afirma el productor Tom Rosenberg-. De hecho, todo lo que pasa en el juego, aunque tenga lugar en el futuro, está en realidad sucediendo ahora mismo, aunque en menor medida". El protagonista de la cinta, y que lleva el peso de la acción, es Gerald Butler, conocido por 300, mientras que el cerebro del gran juego que vertebra la historia es interpretado por Michael C. Hall, el hombre de las autopsias en ‘Dexter’.
Curiosidades
Paradójicamente al concepto tecnológico de ciencia ficción y realidad virtual, la producción decidió trabajar fundamentalmente en exteriores reales y transformarlos en nuevos entornos. "Queríamos que nuestro futuro fuera pragmático, habitado, real, no algo que se hubiera creado en una mesa de dibujo", explica el director Taylor. Por ejemplo, se transformó una mina operativa de yeso en una cárcel, y se rodó en una gigantesca estación de tren.