Sinopsis

 La taxista Limi lleva buscando a su prometido, Fang Wen, desde que éste desapareció tras la negativa de los padres de ella a la boda. Qiu Shuitian es un ladrón de poca monta procedente del campo que llega a la gran ciudad con la esperanza de llevarse algún botín de vuelta a casa y de recuperar a su verdadero amor. Por último, Feifei es una drogadicta en proceso de desintoxicación que ha encontrado el apoyo necesario en su amante y socio comercial Ma Bing. Una muerte misteriosa y su posterior investigación hará que se entrelacen las vidas de estos personajes, desvelando poco a poco la extraña conexión existente entre ellos.

Comentario

 En 2008 el cine asiático no hizo mucho ruido en los circuitos de los festivales. El chino Cao Baoping se ha escapado de las habituales redes de distribución –no es un director consagrado ni ha sido este un título alabado masivamente- y estrena su segunda película –la primera fue Trouble Makers- en nuestro país gracias probablemente al premio Nuevos Directores en el último certamen del Festival de San Sebastián. El argumento podría haber dado pie a una historia cálida y conmovedora en la forma de una buena parte del cine chino de los últimos tiempos pero sin embargo el cineasta da vida a un thriller estilizado al que pretende otorgar una mayor complejidad que a la proverbial aproximación de sencillez de muchas generaciones de directores recientes. "La historia es como un enigma. Realmente te hace querer descubrir cuál es la respuesta. Mantiene el reparto de preguntas sin explicarlas. Por ejemplo, la pareja formada por mí y Ai Feifei crea una situación; Li Mi es otra situación y los dos ladrones crean otra. Todos parecen no estar relacionados pero después del gran accidente de coche y de la aparición de un poeta, los todos los grupos conectados" apunta Deng Chao, uno de los actores protagonistas.