Pitka, un estadounidense que fue educado por gurús fuera de su país, se enfrenta a una difícil misión: reunir a un famoso jugador de hockey con su mujer, que lo ha dejado por un atleta rival, Jacques Grande.
Comentario
Tras hacerse un hueco en el cine con la saga Austin Powers y con su doblaje para la serie Shrek, el actor Mike Myers se pone a las órdenes del director debutante Marco Schnabel para interpretar a varios personajes en El gurú del buen rollo, un estreno en nuestro país que coincide con el rodaje de su sorprendente nuevo proyecto, el esperado Inglorious Basterds de Quentin Tarantino. Myers, que participó en la escritura del guión, y el director se inspiraron en la India, en su tradición espiritual, en su exuberancia, y en la música de las películas de Bollywood. “Cuando murió mi padre, inicié un búsqueda espiritual, y eso es algo muy difícil cuando eres cómico porque tu instinto natural es ser cínico –explica Myers-. Pero cuando te cruzas con sabiduría y con ciertas cosas, la vida se vuelve más feliz”. La crítica estadounidense la puso a caldo en su estreno americano de este verano y en taquilla tampoco ha funcionado, por lo que es casi imposible que recupere finalmente su presupuesto (62 millones de dólares). Además de en las muecas de Myers, las esperanzas de los productores sobre el reparto descansan sobre Jessica Alba y su danza del vientre. Por lo demás, aparecen también por la pantalla Justin Timberlake, Romany Malco, Meagan Good y Ben Kingsley.
Curiosidades
Myers tomó como modelo para el gurú Pitka el estilo del gurú de los Beatles, el famoso Maharishi Mahesh Yogi.