Sinopsis

 ¿Comunista, anticolonialista, extremista de derechas? ¿Qué convicciones morales tiene Jacques Vergès? Barbet Schroeder nos conduce por los senderos más oscuros de la historia en un intento de iluminar el misterio que se esconde tras esta enigmática figura. Durante la guerra de Argelia, Vergès era un joven abogado que abrazó la causa anticolonialista, defendió a Djamila Bouhired, logró su libertad, se casó con ella y tuvieron dos hijos. De repente, cuando estaba en la cima de su notable carrera, desapareció sin dejar rastro durante ocho años. Cuando retornó de su misteriosa ausencia, se encargó de la defensa de terroristas de todo tipo, desde Magdalena Kopp a Anis Naccache, pasando por Carlos el Chacal, y representó a monstruos de la Historia como el teniente nazi Klaus Barbie.

Comentario

 Jacques Vergès es el ejemplo de cómo la abogacía y un sentido elevado de la moral pueden entrar en conflicto. En el caso de Vergés, podemos contemplar un asombroso currículum de clientes, como son los casos citados en la sinopsis o los de Slobodan Milosevic y Sadam Hussein. Amigo también de Pol Pot, todos estos dictadores y asesinos vieron rebajadas sus penas o incluso salieron indemnes. Este tailandés de nacimiento y francés de adopción es el foco de atención de la cámara de Barbet Schroeder. El fundador de Les Films du Losange, con la que produciría algunos de los títulos más importantes de la Nouvelle Vague, utiliza el registro documental para retratar de manera severa pero imparcial a un individuo que, a casi cualquier luz, se considera como un monstruo sin escrúpulos. Apasionado de los retos, ‘el abogado de terror’ explica que su labor es absolutamente necesaria para averiguar la verdad y para llevar a cabo un juicio civilizado y no un linchamiento. Schroeder ya tiene experiencia en figuras polémicas. En su filmografía encontramos a un dirigente como Idi Amin o a un autodestructivo artista como Charles Bukowski. Vergès sale a menudo en la televisión dada su reconocida vanidad pero hasta ahora nadie había profundizado en su persona, salvo por dos biografías en papel. “Son muy negativas y escarban en su pasado –apunta Schroeder-. No se pueden considerar serias porque, francamente, para hacer una biografía de verdad, debes esperar unos veinte años ya que muchas cosas se esconden. De hecho, el Servicio Secreto Francés tiene información que sólo será revelada tras su muerte”.

Curiosidades

 Vergès asegura en el documental que hubiera defendido a Hitler y, no sólo eso, sino que “incluso defendería a Bush”, con la condición de que se declarase culpable. Aunque no aparece en el montaje final, la página oficial recoge que el jurista aseguró que presentaría a Bush como un hombre de poca inteligencia, convencido de la supremacía de los WASP americanos sobre el resto del mundo y víctima de la educación que ha recibido.

Enlaces

Bases de datos: IMDb | Filmaffinity | Cine 365 |
Críticas: Fotogramas | Fila 7 |
Críticas (inglés): Metacritic |
Más información: 20 minutos | La butaca |

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