Al descubrir que su marido tiene una amante, Yeon decide visitar a un preso desconocido cuyos continuos intentos de suicidio han sido noticia en la televisión. Jin se queda sorprendido cuando Yeon vuelve a visitarle. Poco a poco, el preso se abre a la mujer. Yeon le dice a su marido que tiene a otro. Éste, celoso, la sigue a la cárcel y le prohíbe que vuelva a ver a Jin. Pero Yeon y Jin están mucho más unidos de lo que cree su marido...
Comentario
Llega a España lo último de uno de los directores más famosos de la ola de cine surcoreano que ha invadido el mundo durante este siglo: Kim Ki-duk. En este caso, se estrena Aliento, su película de 2007 (el cineasta estrena normalmente una cinta por año, a veces dos), que llega después de dos pequeñas decepciones como El arco o Time. Educado en Bellas Artes en París, el cineasta mantiene una obsesión por lo poético y la belleza estética, y a nivel temático Aliento nos lleva a un mundo de soledad donde dolor y amor se unen. “A veces en la vida hay momentos difíciles en los que nos cuesta respirar. La condena a muerte es la ejecución legal del aliento pero aunque no estemos en el corredor de la muerte, no siempre respiramos libremente. El dolor puede ser aún mayor que la condena a muerte… cuando la confianza desaparece”, expresa Kim Ki-duk. La película fue presentada en la sección oficial de la edición 2007 del Festival de Cannes. Los actores protagonistas son el taiwanés Chang Cheng (Tigre y Dragón) y Zia (El guardacostas), además de Jung-wo Ha y In-Hyung Kang, que ya trabajaron con Kim en Time.
Curiosidades
La película fue rodada en tan sólo 15 días, con un presupuesto restringido, como suele ser habitual en el surcoreano, consciente de que su cine no es de los más rentables en la industria de su país.