En uno de esos barrios que todas las ciudades tienen, con una de esas plazas que todos esos barrios tienen, pasan las horas tres jóvenes que empiezan a dejar de serlo. Nandi, Roberto Carlos y Gabriel son suficientemente adultos para tomar las riendas de su vida, pero también lo suficientemente inmaduros para no saber cómo hacerlo. Ven pasar la vida divagando en un banco entre chistes y “litronas”. La aparición de Sunci, una chica dispuesta a formar pareja con Roberto Carlos, rompe el equilibrio que parecía anclarlos a su propio mundo.
Comentario
La industria de cine andaluza no es de las más pujantes en nuestro país. Excepciones en el cine de estas latitudes las encarnan directores como Jesús Ponce, cineasta sevillano que alcanzó bastante notoriedad con su primer largo, 15 días contigo. Después del encargo de una cinta de género como Skizo, el andaluz se embarcó en este proyecto, que también escribe, y volvió a utilizar una estética de cine social heredada de la tradición de Ken Loach o, en nuestro país, Fernando León de Aranoa. De hecho, el argumento de esta cinta recuerda al Barrio de éste. Esta obra de cine cotidiano y buenrollista participó en la sección oficial del Festival Internacional de Sevilla. Se trata de una comedia amarga que en este caso presenta a jóvenes que ya rondan la treintena y que pasan sus horas muertas en el banco de una plaza del barrio con cerveza en mano y reflexionando con humor sobre sus problemas. “Lo que para unos es un drama porque lo viven, para los demás es una comedia porque no lo viven, así que esto es una comedia”, apunta el realizador. El reparto lo componen Iván Massagué, Darío Paso, Juanfra Juárez y Pilar Crespo, quien encarna al elemento extraño que rompe la cotidianeidad.
Curiosidades
La chica protagonista salió de un casting de más de sesenta chicas en Sevilla y Madrid. Tenía formación interpretativa pero hasta ahora no había hecho cine, ni cortos en vídeo. Desde el rodaje ha encadenado tele y otros trabajos.