En los Estados Unidos hay un grupo de élite de hombres y mujeres a los que se les confía las llaves del país. Los agentes del FBI juran, no sólo proteger la ley, sino servir a los Estados Unidos con el mismo honor con el que lo harían a su propia familia. Esta es la historia de un hombre que los traicionó a todos. En febrero de 2001, el conocido agente Robert Hanssen fue declarado culpable de traición contra los Estados Unidos. Durante más de dos décadas, Hanssen vendió de forma sistemática secretos clave de inteligencia a la antigua Unión Soviética.
Comentario
Hace cuatro años el realizador Billy Ray iniciaba su carrera como director con una de las cintas más interesantes de ese año: El precio de la verdad (Shattered Glass). Ahora vuelve a transitar por caminos similares. Si en su ópera prima se basaba en la historia real de un periodista impostor que violaba el precepto de la verdad inventándose algunos hechos en sus reportajes, en esta ocasión su fundamento es la historia real de una agente del FBI que traiciona a su país vendiendo información al enemigo soviético. “Tiendo a sentirme atraído por historias que tratan el engaño –reconoce Ray-. O quizá simplemente me siento atraído por personajes que están partidos por la mitad, capaces de vivir un tipo de vida en el exterior y tener una vida interior muy diferente”. La personificación de Robert Hanssen la conforma Chris Cooper (El ladrón de orquídeas) pero el reparto cuenta con otros activos de prestigio dentro de la industria como Ryan Phillippe, Laura Linney o Dennis Haysbert.
Curiosidades
Durante la película se ve repetidas veces un póster con nombres y fotos de espías que han sido detenidos, así como una pequeña sinopsis de sus crímenes y cuánta pena de prisión les cayó. Esos pósters existen realmente en instalaciones del gobierno americano.