Sinopsis

 Steven Russell lleva una existencia aparentemente ordinaria: organista de la iglesia local, felizmente casado con Debbie y miembro del cuerpo de policía local. Hasta que sufre un grave accidente de coche que lo lleva a experimentar la epifanía definitiva: es gay y piensa disfrutar al máximo de la vida, aunque tenga que violar la ley para conseguirlo. Steven adopta un estilo de vida extravagante, recurre a estafas y fraudes para llegar a fin de mes y acaba encerrado en la penitenciaría del estado, donde conoce al amor de su vida, un chico sensible y de voz suave llamado Phillip Morris.

Comentario

 Colaboradores como guionistas en Bad Santa y Una pandilla de pelotas, Glenn Ficarra y John Requa se pasan a la dirección a partir de su propio guión adaptado y basado en la novela de Steve McVicker, antiguo reportero de investigación del periódico Houston Chronicle. Los cineastas, que han recibido elogios de la crítica por el film, intentaron llevar esta historia de estafadores a otros términos, diferentes a los de películas como Los timadores y Atrápame si puedes, sustentándose en una relación amorosa homosexual que, aún hoy, sigue siendo inusual en Estados Unidos. "Lo primero que nos atrajo fue el hecho de tratarse de una historia de amor sobre un tipo que hacía toda clase de cosas increíbles por amor. Nunca habíamos hecho una historia de amor, nunca nos había interesado, pero el material nos pareció demasiado interesante para negarnos", reconoce John Requa. A pesar de ser una película de presupuesto reducido, el film cuenta con dos estrellas de la talla de Ewan McGregor y Jim Carrey.

Curiosidades

 El diseñador de vestuario David C. Robinson fue de gran ayuda para ayudar a plasmar la vida y el entorno de Steven Russell, ya que tienen más o menos la misma edad, se criaron por la misma zona, y ambos salieron del armario por la misma época.

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