Tracy Turnblad, una chica grande con un gran peinado y un corazón aún mayor, tiene una pasión: bailar. Su sueño es aparecer en “El Show de Corny Collins,” el programa de baile televisado más codiciado de Baltimore. Tracy parece perfecta para el programa, a no ser por un problema no tan pequeño: no cabe. Su figura generosa siempre la ha apartado de los grupos de moda, cosa que le recuerda continuamente su excesivamente protectora madre, Edna. Esto no detiene a Tracy, porque si existe alguna cosa que esta gran chica sabe es que ella nació para bailar.
Comentario
Vuelven los 60, vuelven los cabellos cardados, las pelucas, los vestidos de colores brillantes y la música más bailable e inocente del siglo XX. Todo vuelve gracias a Hairspray, una nueva adaptación del musical de Broadway ganador de un premio Tony y éxito de taquilla durante años. La película bebe sobre todo de las aguas del clásico creado en 1988 por John Waters, ya que el guión es sobre todo suyo. Sin duda el director Adam Shankman (famoso coreógrafo y amigo de Waters) tenía a Divine en la mente cuando pensó en John Travolta (Grease) para interpretar a Edna Turnblad. Sin embargo la protagonista de la cinta es la debutante Nokki Blonsky. Completan el reparto Michelle Pfeiffer (Stardust), como “la mala” de la película; Christopher Walken (Atrápame si puedes), como el padre de la protagonista y marido del personaje interpretado por John Travolta, y Queen Latifah que da vida a una cantante profesional.
Curiosidades
Amén de mucha laca, Hairspray ha significado un considerable esfuerzo de maquillaje para transformar a John Travolta en Edna Turnblad. Casi cuatro horas diarias eran necesarias para maquillar y desmaquillar al actor.