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 Sin
duda, a la hora de elegir un director representativo del cine
norteamericano en estas últimas décadas, el nombre de Steven Spielberg
ronda en la cabeza de cualquier cinéfilo. Además de director de
las cintas de mayor éxito comercial en los años 80 y 90, Spielberg
ha sido todo lo que se puede ser en la industria: productor, guionista,
asesor, ayudante de director, de producción, director de segunda
unidad, montador... y miembro fundador de Dreamworks SKG, una
de las productoras más poderosas del panorama actual. Sobre Steven
Spielberg ya se ha dicho casi todo, por eso nos hemos decidido
por reflejar algunos de los aspectos menos conocidos del director
de filmes como E.T. El Extraterrestre o Jurassic Park.
Se graduó en la facultad
con 56 años. Steven Spielberg se vio obligado a abandonar
la Universidad Estatal de California, donde estudiaba cine, en
1968 con el objetivo de concentrarse en su incipiente carrera
profesional. Ese mismo año dirigió uno de sus proyectos preferidos,
"Amblin", un mediometraje sobre dos autoestopistas que se encuentran
en su camino desde el desierto hacia la playa. El director, sin
embargo, nunca abandonó su ilusión de graduarse y lo logró en
2002, con 56 años. Al subir al estrado para recoger el título,
la orquesta interpretó el tema central de la saga Indiana Jones
en su honor.
Siempre quiso dirigir una
película de James Bond. Y estuvo a punto de lograrlo cuando
la Metro Goldwyn Mayer trató de contratarle en 1980. Spielberg
puso como única condición dirigir la siguiente película de la
saga Bond, algo a lo que los responsables de la Metro se negaron
con rotundidad. Pero el cineasta no renunció a la idea de rodar
una historia de acción, con héroe incluido, y le propuso a Paramount
la idea de un arqueólogo que busca el arca de Jesucristo: Indiana
Jones. La trilogía de Spielberg ganó mucho más dinero que todas
las películas de James Bond juntas.
Mantuvo una bonita amistad
con Joan Crawford. Los dos se encontraron en las condiciones
más inverosímiles: ella, como una estrella en franco declive,
y él como ayudante de dirección en una serie televisiva titulada
"Horror Galleries", en la que Crawford intervino brevemente. Al
parecer, el joven Spielberg impresionó tanto a la vieja estrella
que durante una rueda de prensa al finalizar uno de los episodios,
Crawford exclamó: "No deberían hacerme preguntas a mí. Entrevisten
a ese chico que está allí, entre el público: va a ser el mayor
director de cine de todos los tiempos".
 Fue
el inventor del "Product Placement". Parece mentira, pero
hasta que Spielberg decidió que a E.T. le gustarían los caramelos
"Rieces Pieces" y no otros, ningún productor había tenido la idea
de hacer publicidad utilizando la línea argumental de una película.
La idea funcionó tan bien, que muchos otros comenzaron de inmediato
a hacer lo mismo. También fue uno de los directores que previó
la importancia que alcanzarían los efectos especiales en el cine
comercial. Para sus películas siempre ha contratado a la empresa
de su amigo George Lucas, "Industrial Light and Magic".
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